Tengo dos lenguas. Una para lamer las heridas de tu piel ácida.
Otra para gritarte. Marcar todo aquello que tanto odias de ti misma.
Tengo dos lenguas. Una para saborearte y escupir al aire palabras mudas.
Otra para odiarte. Tararear una melodía repetitiva como nuestra bilis.
Tengo dos lenguas. Una de ellas busca a la otra, esquiva como una anguila.
Tengo dos lenguas. Por más que me empeñe jamás se entenderán.
Tengo dos lenguas. Una bífida para buscar el camino. Otra para encontrarte.
Atrapar los olores que forman parte de mi recuerdo.
Por esta rareza de la naturaleza recorro el mundo enjaulado en un circo de variedades junto a la mujer barbuda y el hombre elefante. Soy una atracción de feria atrapado en un mundo de iguales...quiero escaparme.
Tengo dos lenguas. Una para rozarte desde el deseo de palabras susurradas. Otra para lacerar tu espalda con la urgencia de la huida.
Entederas que no haga comentario alguno ¿Verdad?
ResponderEliminar;)
No...no lo entendere ;)
ResponderEliminarSi es por las supresiones...tiene la sencilla explicación de borrar lo que no entiendo...me generaba estress ;)
ResponderEliminarNo, no es por las supresiones. No soy tan simple...contigo.
ResponderEliminar;)